martes, 11 de marzo de 2008

Y el currículo valió

Recuerdo que una de las lecturas de la semana pasada mencionada, entre uno de los por qué enseñar ciencias en la escuela, por el derecho que tienen los individuos de conocer e interpretar su mundo. Acabo de leer una noticia española que me preocupó, quizás más por los efecto que pueda tener a largo plazo que por la impicaciones próximas o alarmistas.

¿Objeción a Darwin?
La sentencia andaluza que exime a un alumno de cursar Ciudadanía pone en cuestión cualquier asignatura susceptible de interpretaciones ideológicas

¿Y si algún padre decide que no quiere que a su hijo se le explique la Teoría de la Evolución de Darwin en Ciencias Naturales porque cree en el creacionismo? ¿O el marxismo, en clase de Historia? ¿Tendría derecho a que su hijo no aprendiera estas asignaturas? Estas preguntas quedan en el aire tras la sentencia dictada la semana pasada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía en la que se admite que los padres de un alumno objeten a la materia de Educación para la Ciudadanía "por razones filosóficas o religiosas".


Toda la nota en este enlace. Pa' pensar no creen.

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